"En el transcurso de la lucha contra los criminales que han destruido y profanado a Rusia, debe recordarse que, debido a la completa depravación de la moral y el absoluto libertinaje, intelectual y físico, que ahora prevalece en Rusia, ya no es posible mantener nuestro antiguo estándar de valores. "Verdad y misericordia" ya no son admisibles. De ahora en adelante sólo puede haber "verdad y dureza despiadada". El mal que ha caído sobre la tierra, con el objeto de destruir el principio divino en el alma humana, debe ser extirpado de raíz y rama. La furia contra los jefes de la revolución, sus devotos seguidores, no debe conocer fronteras."
Barón Román Fyodorovich von Ungern-Sternberg, Orden General a los destacamentos rusos en el territorio de la Siberia soviética núm. 15 dado en Urga, 21 de mayo de 1921